Encontrar respuestas eficaces gracias al coaching
Como coach y formadores, todos estamos familiarizados con las buenas prácticas para gestionar el estrés en el día a día. Sin embargo, estas técnicas se topan con sus límites cuando los factores que desencadenan el estrés son inherentes a nuestras creencias o a nuestro tipo de personalidad. A continuación le presentamos las herramientas que puede utilizar para gestionarlo.
4 consejos para controlar el estrés :
«Alimentación sana», «meditación», «deporte» y «escuchar música» son las 4 palancas clave identificadas en el artículo para gestionar el estrés a diario.
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- Conocemos estas herramientas como técnicas mente-cuerpo. Nos permiten dar un paso atrás, desprendernos de nuestros pensamientos rumiantes y estresarnos menos. Podríamos completar la lista con un sinfín de técnicas como la respiración diafragmática, la coherencia cardiaca y todas las técnicas fisio-relajantes que implican uno de los 5 sentidos (música, sí, pero también baños perfumados, contemplación visual de un paisaje o un cuadro, etc.).
- También se pueden utilizar otras técnicas menos accesibles pero potencialmente más potentes: sofrología, TIPI (técnicas de identificación de los miedos inconscientes), etc. Para los profesionales de apoyo, requieren formación.
Herramientas para trabajar las creencias limitantes que generan estrés
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- En coaching, trabajamos entorno a estas palancas para gestionar el estrés que se ha «instalado» en nuestros clientes que lo solicitan. Hay que trabajar los aspectos cognitivos, en particular las creencias que generan estrés (no valgo, no podré hacerlo, etc.).
- Las técnicas inspiradas en la TCC (Terapia Conductual) parecen ser las más potentes. Los resultados psicométricos de las TCC muestran que son muy eficaces para gestionar el estrés. Pero para hacerlo con Coaching Cognitivo-Conductual, ¡se necesita una formación en profundidad! Por ejemplo, necesitamos dominar el método ABCDE de Ellis para poder ofrecer a nuestros clientes el mejor apoyo posible. Como recordatorio, uno de los objetivos de este protocolo es que el cliente identifique que el acontecimiento que desencadena el estrés no tiene un impacto directo en el comportamiento asociado, sino que una creencia (que hay que desestabilizar) es la principal justificación del problema.
- Otros modelos muy eficaces, como la PNL, son potentes en coaching para gestionar estos problemas: técnicas de desestabilización de creencias, reencuadre en 6 pasos, protocolos de visualización como Swish, etc. También en este caso, es necesario tener una formación en profundidad.
- Estas técnicas son muy útiles en coaching, pero no pueden utilizarse en la gestión del estrés o en la formación sobre eficacia personal porque son largas y complejas.
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